El Dios de Spinoza
Todo está colmado de Energía Vital
"Dios ha dejado pistas en la naturaleza para que recuperamos nuestra esencia".
El conocimiento científico, ha redescubierto desde hace muchos años el DUALISMO UNIVERSAL, teoría bajo la cual, se acepta que:
Todo en el Universo es Doble.
Desde esta perspectiva, los seres que aquí existimos estamos compuestos de Energía y Materia, ¡SI! así como el mundo subatómico se expresa en partícula y ondas, así mismo nos manifestamos nosotros. Viene a mi un dicho que solían decir mis abuelas y tíos cuando era pequeña:
"No hay bien sin mal".
Y es que, según el Kybalion existe un principio universal que reza:
"Todo es doble, todo tiene dos polos, todo su par de opuestos, los semejantes y los antagónicos, son lo mismo. Los opuestos son iguales en naturaleza pero no en grado, los extremos se tocan. Todas las verdades son semi-verdades".
Esto fue algo que llamó la atención de una de las mentes más brillantes de la historia humana antigua: Platón, quien expresaba que en un arrebato de amor, Dios le dio alma a la materia.
Es necesario resaltar un dato curioso, los griegos y todos los antiguos personajes que nos dejaron el conocimiento necesario para encontrar el camino de regreso a nuestra esencia, encontraron ese camino desde su interior, sus teoría le dieron vida a lo que hoy conocemos como el método científico, y sin embargo, hay que recordar que ellos vinieron aquí a servir de esa manera a la raza humana, "a dejar un caminito de migas de pan, para que los demás lo siguiéramos", y todo salió de su experiencia, los experimentos que dieron luz a su sabiduría se produjo en el laboratorio de la vida en el mundo, en la sociedad y en la convivencia.
Volviendo a Platón y la dualidad universal, los seres humanos somos entonces, alma y cuerpo, materia y energía, partícula y onda. Luego, apareció René descartes con una gran interrogante, algo que te va a volar los tapones, primero porque es algo que planteó en su famoso Discurso del Método, pero es tan extenso y tan enredado que pocos logran entenderlo y segundo, es el tema central de una de las películas más controversiales y que lleva un tiempo despertando a quienes logran entender su mensaje, The Matrix:
¿Cómo saber si soy real o no? Cómo estar seguro de que mi cerebro no está conectado a un simulador que me hace creer que soy un hombre francés del siglo XVII.
De allí, su tan famosa frase: "Pienso y Luego Existo", en otras palabras, la única forma para Descartes de darse cuenta de su propia existencia era a través del pensamiento porque en función de eso, se podría explicar que el alma es lo que piensa, y lo que piensa es Dios. Para Descartes, el ser humano era una sustancia dual:
Sustancia Pensante (Alma) y Sustancia Extensa (Cuerpo)
Somos un solo ser que se expresa de dos maneras, para poder existir en el Universo en función del Principio de Polaridad. Pero entonces... nos conformamos con lo que pasa a través de nuestros sentidos y aceptamos la idea de que, la ciencia y la religión se encargarían, por separado de cada sustancia; a saber, La ciencia de la materia o cuerpo, y la religión de la energía o alma. Además, ¡Algo raro pasa! La religión no nos enseña el verdadero estudio de la sustancia pensante, no sabemos cómo se manifiesta nuestra alma, y más aún nos han enseñado a temerle.
Entra en escena Baruch Spinoza, el filosofo maldito o renegado por deducir que según la teoría de Descartes, la dualidad cuerpo-alma solo necesita de si misma para existir, por lo cual no puede haber sido creada por Dios, lo que da un duro golpe a lo que expresa la religión que, en nuestro pensamiento es quien se encarga de los temas relacionados con el alma; desde este punto de vista, el hombre es Dios o más bien, Dios debió donar su energía (alma) a la materia (cuerpo) para que pudiera tener movimiento.
Siendo así, Dios no crea las cosas, Dios es las cosas que existen, y es en realidad, la única sustancia que existe en el Universo. Dios es, animales, plantas, átomos, cosas, y todo lo que se manifiesta de forma material o en ondas.
Mi opinión:
La naturaleza es sagrada, es la manifestación de Dios; y no sólo eso, todos lo somos.
Desde la Perspectiva de Baruch Spinoza, encuentro que, es obligatorio hacernos responsables de nosotros mismos y de la forma en la que nos relacionamos con todo en el Universo. ¡También es obligatorio el respeto! Todos y cada uno de nosotros estamos en esta experiencia para crecer y, más allá de eso, para amar de la forma infinita que nos ama la energía que nos envió aquí para experimentar, evolucionar, servir o simplemente vivir, cual sea tu creencia es válida.
Finalmente, entendiendo que todo es dual, podemos comprender que nosotros somos quien piensa (Mi, Ego) y quien observa (Yo, Esencia). El que piensa es la mente humana experimentando todo a través de sus sentidos físicos, el que observa es, la consciencia infinita que experimenta el amor como unidad.
Mi Dios, es el Dios de Baruch Spinoza, aquel que colma de energía de vida a todo. Se manifiesta en mi, en ti, en mis gatitos, en los perros de la calle, en los árboles en los parques y hogares, en toda la materia mundial, y en todo el Universo. ¿Cuál es el tuyo?
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